El primer ministro de Haití, Alix Didier Fils-Aimé, ha instado al nuevo ministro de Relaciones Exteriores, Harvel Jean-Baptiste, a reactivar el diálogo con la República Dominicana para abordar una serie de temas clave que afectan a ambas naciones. Durante su discurso en la ceremonia de toma de posesión del canciller, Fils-Aimé subrayó la necesidad de una diplomacia más activa, con un enfoque prioritario en la protección de los haitianos que residen en territorio dominicano.
El primer ministro destacó que cualquier conversación bilateral debe realizarse con estricto apego a los tratados y acuerdos internacionales sobre derechos humanos y derechos de los migrantes. "Nuestro gobierno está comprometido a garantizar que se respeten los derechos, la protección y la seguridad de nuestros ciudadanos", afirmó Fils-Aimé, en un claro mensaje hacia la comunidad internacional y la República Dominicana.
Retos en la Agenda Bilateral
La relación entre Haití y la República Dominicana enfrenta varios desafíos complejos. Además de la crítica situación migratoria, que afecta a miles de haitianos en suelo dominicano, se suman otros temas sensibles como el tráfico de municiones, la seguridad fronteriza, el contrabando y la cooperación comercial entre ambos países.
Un ejemplo reciente de la necesidad de reforzar el diálogo sobre seguridad es el desmantelamiento por parte de las autoridades dominicanas de una red de tráfico de municiones, que operaba con materiales provenientes de arsenales policiales y militares. Este incidente ha resaltado la urgencia de establecer mecanismos más sólidos de cooperación en temas de seguridad. Además, la cooperación aduanera y el fortalecimiento de las relaciones comerciales son áreas clave para la estabilidad y el desarrollo económico de Haití y la República Dominicana.
Un Nuevo Pacto de Convivencia
Fils-Aimé también hizo hincapié en la importancia de construir lo que llamó un "nuevo pacto de convivencia" entre los dos países que comparten la isla. En este sentido, varios observadores han señalado que un Haití más fuerte y estable resulta ser un socio comercial más atractivo para la República Dominicana. Por el contrario, un Haití en crisis representa un desafío mayor, especialmente en términos de migración irregular y seguridad fronteriza.
"Es necesario trascender las posturas nacionalistas y restablecer intercambios respetuosos y serenos, en beneficio mutuo", afirmó el primer ministro haitiano, haciendo un llamado a un enfoque más cooperativo y menos polarizado.
