El presidente dominicano Luis Abinader expresó su agradecimiento al senador estadounidense Marco Rubio, quien fue nominado por Donald Trump como posible secretario de Estado de EE. UU., por reconocer la difícil situación que enfrenta la República Dominicana debido a la crisis en Haití.
Durante su audiencia de confirmación, Rubio elogió el crecimiento económico y la resiliencia del país caribeño, a pesar de los desafíos derivados de la inestabilidad en el vecino Haití. El legislador también destacó que la República Dominicana ha sido uno de los países que más rápidamente se recuperó de los efectos de la pandemia del COVID-19, resaltando el papel clave del turismo en esa recuperación.
En respuesta, Abinader utilizó su cuenta en la red social X (antes Twitter) para agradecer públicamente las palabras del senador y reiterar la importancia de buscar una “solución colectiva” ante la crisis haitiana.
“Agradezco a Marco Rubio por sus palabras sobre la República Dominicana y por reconocer la presión que enfrentamos debido a la violencia en Haití. Es fundamental que busquemos una solución colectiva”, afirmó el mandatario.
Rubio también fue cuestionado por el senador Tim Kaine sobre los países latinoamericanos con mayor crecimiento. Mencionó a la República Dominicana como un ejemplo positivo, aunque subrayó que el país se ve directamente afectado por el deterioro de la situación en Haití.
En su intervención, Rubio señaló además que Panamá habría influido en la decisión de la República Dominicana de romper relaciones diplomáticas con Taiwán y estrechar lazos con China, como parte de lo que calificó como una estrategia de expansión geopolítica de ese país asiático en América Latina.
“China ha actuado con mucha agresividad en la región, persuadiendo a varios países, entre ellos Panamá, para que influyeran en otros como la República Dominicana y Nicaragua”, puntualizó el senador republicano.
La postura de Abinader reafirma el interés del gobierno dominicano en que la comunidad internacional se involucre más activamente en una respuesta multilateral a la crisis de Haití, que continúa afectando la estabilidad de toda la región.
