Mis familiares son víctimas de ser hermanos de Danilo Medina, por eso están presos y por eso los persiguen, porque son mis hermanas”. Así explicó el expresidente Danilo Medina la situación judicial que enfrenta su familia en el marco de la red de corrupción administrativa conocida como Antipulpo, especialmente en lo que respecta a sus hermanos Alexis Medina y Carmen Magalys Medina.
Medina afirmó que la situación de su familia es fácil de entender, y señaló que lo que ocurrió fue una persecución política basada en lo que él denomina "lawfare" o guerra judicial, un fenómeno que, según él, ha afectado a toda la región.
En una entrevista en el programa radial Sol de la Mañana, el presidente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) recordó las elecciones de 2016 y se preguntó: “¿Cómo se explica que a un gobierno que fue elegido con un 62% de los votos le montaran un movimiento de protesta casi desde el inicio de su mandato para desacreditarnos?”.
Medina relató que al comienzo de su segundo mandato, se crearon imágenes en las que él y el expresidente Leonel Fernández aparecían tras las rejas, acusados de ser ladrones. El exmandatario resaltó que esto formaba parte de lo que consideró el “libreto de la judicialización de la política”, donde el objetivo era desacreditar tanto a él como a su familia.
Explicó que no había hablado previamente sobre el tema porque, según él, "cuando hay ruido no te escuchan". Añadió que se montó una campaña de difamación y descrédito en su contra, lo cual hacía inútil cualquier intento de defenderse, ya que no le permitían hablar.
"No bastó con que yo nombrara una comisión de notables del país, de todos los sectores: iglesia, empresariado, trabajadores y organizaciones de la sociedad civil, para que investigaran Punta Catalina", recordó. "Inventaron una campaña para presentar a Punta Catalina como el cuerpo del delito con el objetivo de meterme preso, algo que todos recuerdan".
