Los tribunales británicos han rechazado el recurso presentado por las dos activistas de Just Stop Oil que arrojaron sopa de tomate sobre el cuadro Los girasoles de Vincent Van Gogh, expuesto en la National Gallery de Londres.
Phoebe Plummer y Anna Holland apelaron sus condenas de 24 y 20 meses, respectivamente, argumentando que las sentencias eran excesivas e injustas, y se autodenominaron "presas políticas".
El fiscal había solicitado que se mantuvieran las condenas como medida disuasoria.
En total, 16 activistas del grupo contra los combustibles fósiles apelaban condenas de hasta cinco años de prisión por participar en acciones que bloquearon autopistas y túneles durante 2022.
Seis de las sentencias fueron reducidas, incluida la del fundador de Just Stop Oil, Roger Hallam, que vio su condena limitada a un máximo de cuatro años. Los activistas habían planeado una reunión en línea para bloquear la autopista M25, en las cercanías de Londres.
Tras conocerse la decisión, una veintena de activistas se levantaron en silencio de sus asientos en la sala judicial y dieron la espalda a la juez, Sue Carr, la magistrada más importante de Inglaterra y Gales, luciendo camisetas con el mensaje "Corrupción en los tribunales".
Katie de Kauwe, abogada de Amigos de la Tierra y parte del equipo de apelación, celebró la sentencia como un "avance positivo para el movimiento climático en su conjunto, y para todos los movimientos pacíficos que exigen responsabilidades al gobierno".
Aunque las acciones de los grupos ecologistas siguen dividiendo la opinión pública británica, estas sentencias representan las más severas impuestas por protestas no violentas. Los abogados de los condenados están evaluando la posibilidad de llevar el caso ante la Corte Suprema.
