Santo Domingo. El ministro de Asuntos Exteriores de la Federación de Rusia, Serguéi Lavrov, llegará este lunes en horas de la noche a República Dominicana, en el marco de una visita oficial que incluye reuniones de alto nivel y la apertura formal de la primera embajada rusa en el país.
El arribo de Lavrov está programado para las 7:20 p. m. por el Salón de Embajadores del Aeropuerto Internacional de Las Américas (AILA), según confirmó el Ministerio de Relaciones Exteriores (MIREX).
Esta visita tiene lugar durante la conmemoración del 80 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países, y busca consolidar una agenda de cooperación en temas clave como turismo, educación, comercio y asuntos multilaterales.
Reuniones oficiales y agenda prevista
El canciller ruso será recibido la mañana del martes por su homólogo dominicano, Roberto Álvarez, en la sede de la Cancillería. Posteriormente, sostendrá una audiencia con el presidente Luis Abinader en el Palacio Nacional.
Aunque está prevista la inauguración oficial de la embajada de Rusia en Santo Domingo este miércoles, hasta el momento no se han difundido detalles sobre el protocolo del acto inaugural.
Contexto y relaciones bilaterales
La apertura de una misión diplomática rusa en suelo dominicano representa un avance estratégico en la diversificación de alianzas internacionales por parte del Gobierno dominicano, mientras que para Moscú es parte de su política de expansión diplomática en América Latina y el Caribe.
Antes del conflicto en Ucrania y las sanciones internacionales, Rusia figuraba entre los principales mercados emisores de turistas hacia destinos como Punta Cana y La Romana. Además, desde hace décadas, numerosos dominicanos han recibido formación universitaria en Rusia, particularmente en medicina, ingeniería y ciencias.
Proyecciones
Con esta visita, ambos países buscan relanzar su cooperación en distintos sectores. En un contexto internacional marcado por tensiones geopolíticas, la relación con una potencia como Rusia podría traducirse en nuevas oportunidades, aunque también supone desafíos diplomáticos.
Uno de los temas en los que se espera coincidencia es la crisis en Haití, donde tanto Rusia como República Dominicana han expresado preocupación por la falta de acción internacional efectiva para contener la violencia y el colapso institucional.
