
Las autoridades migratorias de Estados Unidos arrestaron a más de 100 personas en Nashville, Tennessee, durante una serie de operativos realizados en conjunto con la Patrulla de Carreteras del estado, como parte de las más recientes acciones del gobierno de Donald Trump para intensificar su campaña de deportaciones masivas.
Según medios locales, agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), junto con la policía de tránsito, realizaron más de 500 paradas de vehículos la semana pasada en distintas carreteras del estado.
De acuerdo con el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), entre los detenidos, 95 tienen antecedentes penales y otros 31 habían reingresado ilegalmente a EE. UU. tras haber sido deportados previamente. El DHS publicó fotos y nombres de cinco de ellos, señalando condenas previas por delitos como posesión de drogas y agresión.
Temor en la comunidad migrante
La operación generó temor e incertidumbre entre la comunidad migrante de Nashville. Grupos activistas salieron en defensa de los detenidos, y el equipo local de fútbol, La Brigada de Oro, canceló un partido programado para el sábado pasado en señal de protesta.
El alcalde de Nashville, Freddie O’Connell, se desmarcó de los operativos y firmó una orden ejecutiva para registrar todos los encuentros entre los residentes de la ciudad y agentes federales.
“Quiero ser claro. No solicitamos ni apoyamos este enfoque de seguridad”, declaró el domingo el alcalde, miembro del Partido Demócrata.
La administración Trump ha redoblado sus esfuerzos para aumentar el número de deportaciones, como parte de su promesa de campaña de expulsar a los más de 11 millones de migrantes indocumentados que viven en el país.
Organizaciones defensoras de derechos humanos y expertos legales han criticado estas acciones, acusando al gobierno de violar el derecho al debido proceso.