
Luego de permanecer una semana detenido, el empresario Antonio Espaillat fue liberado este viernes tras completar los trámites del pago de fianza en el Palacio de Justicia de Ciudad Nueva, en Santo Domingo.
La jueza Fátima Veloz impuso a Espaillat y a su hermana Maribel Espaillat una fianza de 50 millones de pesos, además de presentación periódica e impedimento de salida del país, como parte de las medidas de coerción por su vinculación al colapso de la discoteca Jet Set, ocurrido el pasado 8 de abril, tragedia en la que murieron 235 personas, incluido el merenguero dominicano Rubby Pérez.
Tribunal rechaza prisión preventiva
La magistrada rechazó la solicitud del Ministerio Público, que pedía 18 meses de prisión preventiva para Antonio y arresto domiciliario para Maribel. Según su decisión, ambos imputados presentan arraigo suficiente, con domicilio conocido, actividad empresarial estable, y lazos familiares y sociales en el país.
Asimismo, argumentó que no se ha demostrado riesgo de fuga ni antecedentes de evasión por parte de los acusados.
En cuanto al tipo penal atribuido —homicidio involuntario bajo el artículo 319 del Código Penal dominicano—, la jueza destacó que la pena prevista oscila entre 3 meses y 2 años de prisión correccional, lo cual reduce la pertinencia de una medida privativa de libertad como la solicitada.
Sobre acusación de coacción a testigo
En el caso de Maribel Espaillat, señalada por presuntamente ejercer coacción contra un testigo, el tribunal consideró que no se evidenció alteración de pruebas ni destrucción de documentos. Según la jueza, el contenido de la conversación aportada es ambiguo y, aunque podría ser “éticamente reprochable”, no alcanza el umbral legal de una interferencia sustancial en el proceso.
La jueza recordó que las medidas de coerción tienen carácter cautelar y excepcional, y deben aplicarse para garantizar la presencia del imputado en el proceso penal, no como un castigo anticipado.