
La disputa entre superestrellas del hip hop se intensificó el miércoles cuando Drake presentó una demanda contra Universal Music Group (UMG) por difamación debido a la canción despectiva de su rival Kendrick Lamar, “Not Like Us”.
La demanda, que fue interpuesta en un tribunal federal de la ciudad de Nueva York, sostiene que UMG publicó y promocionó la canción a pesar de que contenía acusaciones falsas de pedofilia contra Drake y sugería que los oyentes debían tomar la justicia por su cuenta. Lamar no está mencionado directamente en la demanda.
Según la demanda, el resultado de esta situación fue que intrusos dispararon a un guardia de seguridad en la residencia de Drake en Toronto, además de generar odio y acoso en línea, lo que afectó su reputación y redujo el valor de su marca justo antes de la renegociación de su contrato con UMG este año. La compañía tiene contratos tanto con Drake como con Lamar.
“La demanda no está dirigida al artista que creó ‘Not Like Us’”, se lee en el documento, refiriéndose a Lamar. “El caso se centra en UMG, la compañía que decidió publicar, promover, explotar y monetizar acusaciones que, según entendió, no solo eran falsas, sino también peligrosas”.
La demanda también sostiene que “UMG lo hizo porque percibió que las acusaciones incendiarias y controvertidas de la canción representaban una mina de oro”.
Además, según el texto legal, la discográfica utilizó su influencia y recursos para asegurarse de que “Not Like Us” se interpretara en el Super Bowl del próximo mes, donde Lamar será el artista principal en el show de medio tiempo.
La demanda, que busca un juicio y una compensación económica aún no especificada por daños y perjuicios, también repite acusaciones previas sobre cómo UMG promovió de manera engañosa la popularidad de “Not Like Us” en plataformas de streaming.
La canción está nominada a cinco premios Grammy, incluidos los de Grabación del Año y Canción del Año.
Los representantes de Drake no hicieron comentarios el miércoles, y tampoco se recibió respuesta inmediata de los representantes de UMG y Lamar ante las solicitudes de comentarios.
En una declaración anterior, en respuesta a acusaciones similares presentadas en documentos previos al litigio, la discográfica negó cualquier intento de socavar a sus artistas, llamando “ofensiva y falsa” la sugerencia. “Empleamos las prácticas éticas más estrictas en nuestras campañas de marketing y promoción”, afirmó la compañía.
La disputa entre Drake, el rapero y cantante canadiense de 38 años y cinco veces ganador del Grammy, y Lamar, un ganador del Premio Pulitzer de 37 años, es una de las más sonadas del hip hop en los últimos años, con ambos artistas siendo dos de las mayores figuras del género.
Ambos colaboraron ocasionalmente hace más de una década, pero Lamar empezó a lanzar ataques públicos contra Drake a partir de 2013. La confrontación se intensificó bruscamente el año pasado.
Los abogados de Drake, del bufete Willkie Farr & Gallagher, con sede en Nueva York, indicaron que la demanda busca responsabilizar a UMG por haber promovido deliberadamente acusaciones falsas y difamatorias contra el artista.
“A partir del 4 de mayo de 2024 y todos los días desde entonces, UMG ha utilizado sus enormes recursos como la compañía discográfica más poderosa del mundo para difundir un mensaje peligroso e incendiario que fue diseñado para destruir el carácter de Drake y condujo a una violencia real en la puerta de su casa”, dijeron los abogados en un comunicado.
“La demanda pone en evidencia las consecuencias humanas y comerciales de la decisión de UMG de priorizar las ganancias por encima de la seguridad y el bienestar de sus artistas, además de exponer cómo manipulan a los artistas y al público para obtener ganancias corporativas”, agregaron.