
Moscú acusó este martes a Kiev de intensificar los bombardeos con el objetivo de entorpecer las conversaciones de paz, y justificó los recientes ataques masivos lanzados por sus fuerzas contra Ucrania como una "respuesta" a lo que calificó como una ola de ataques con drones ucranianos sobre territorio ruso.
El Ministerio de Defensa ruso aseguró que “Kiev, con el apoyo de algunos países europeos, ha emprendido una serie de provocaciones destinadas a frustrar las negociaciones iniciadas por Rusia”, y afirmó que los bombardeos rusos se dirigen exclusivamente a "objetivos militares". Sin embargo, las autoridades ucranianas denunciaron que los ataques causaron la muerte de al menos 13 civiles, incluidos tres menores, el pasado domingo.
Según Moscú, desde el 20 de mayo, Ucrania ha lanzado más de 1.465 drones contra regiones rusas, provocando heridas a civiles, incluidas mujeres y niños. Ante esto, Rusia advirtió que continuará sus ataques “en respuesta a cualquier provocación”.
El lunes, Kiev acusó a Moscú de haber lanzado el mayor ataque con drones desde el inicio de la invasión en 2022, en medio de varios días de intensos bombardeos que saturaron las defensas aéreas ucranianas.
Mientras tanto, los esfuerzos diplomáticos liderados por Estados Unidos para facilitar negociaciones de paz no han logrado avances sustanciales. El presidente estadounidense, Donald Trump, expresó el domingo su frustración con ambas partes, calificando al presidente ruso, Vladimir Putin, de “loco” y advirtiendo sobre nuevas sanciones si persisten los ataques.
No obstante, el Kremlin afirmó que las críticas de Trump no alteran los acuerdos alcanzados, como el reciente canje de prisioneros, el mayor desde que comenzó el conflicto, en el que alrededor de 1.000 personas fueron intercambiadas por cada bando.
“Está claro que Rusia y Estados Unidos no coinciden en todo, pero hay voluntad política para aplicar los acuerdos logrados”, declaró el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
El canciller ruso, Serguéi Lavrov, adelantó que Moscú está preparando un compendio con sus condiciones para alcanzar un acuerdo de paz. El documento se difundirá tras finalizar el canje de prisioneros, aunque aún no ha sido presentado oficialmente.
Por su parte, Ucrania insiste en sanciones más severas contra Moscú. “Tenemos que acabar con esta espera eterna: Rusia necesita más sanciones”, declaró Andrii Yermak, jefe de gabinete del presidente Volodímir Zelenski.
Zelenski reiteró el lunes que los recientes ataques muestran que Moscú actúa con “impunidad”.
La guerra, iniciada en febrero de 2022, ha dejado miles de muertos y destruido amplias zonas del este y sur de Ucrania. Rusia continúa rechazando un alto el fuego incondicional y exige que Ucrania renuncie a unirse a la OTAN y reconozca los territorios ocupados por Moscú como parte de Rusia.
“Una vez que el memorándum esté listo, será enviado a Kiev. Esperamos reciprocidad por parte ucraniana”, dijo este martes la portavoz de Exteriores rusa, Maria Zajárova.