El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, expresó este jueves su decepción por las críticas lanzadas por el magnate Elon Musk contra su plan fiscal y presupuestario, lo que marca un quiebre visible en la relación que ambos mantenían.
“Elon y yo teníamos una gran relación. No sé si seguirá así. Me sorprendió. Estoy muy decepcionado porque Elon conocía los detalles del proyecto de ley mejor que nadie”, dijo Trump desde el Despacho Oval, acompañado por el canciller alemán, Friedrich Merz.
Las declaraciones se producen después de que Musk calificara la propuesta como una “abominación repugnante” y criticara abiertamente a los legisladores republicanos que la aprobaron en la Cámara Baja, acusándolos de cometer un “error”.
En una segunda publicación en X (anteriormente Twitter), Musk advirtió que el plan fiscal de Trump “incrementará masivamente el déficit ya gigante del presupuesto a 2,5 billones de dólares” y que supondrá una carga “devastadoramente insostenible” para los ciudadanos estadounidenses.
La Oficina Presupuestaria del Congreso (CBO, por sus siglas en inglés), una entidad no partidista, estimó el miércoles que el costo neto del plan sobre la deuda pública en la próxima década será de unos 2,4 billones de dólares, por debajo de los 3,8 billones que se proyectaban en mayo.
De aliados a distanciados
Trump y Musk mantenían hasta hace poco una relación cercana. Cuando Musk dejó su puesto al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) el pasado 30 de mayo, ambos intercambiaron elogios en público. Musk incluso aseguró que seguiría asesorando y visitando al presidente.
“Dijo cosas muy bonitas sobre mí y no ha dicho nada malo de mí personalmente, pero estoy seguro de que eso será lo próximo. Estoy muy decepcionado con Elon. Le he ayudado mucho”, expresó Trump este jueves.
Pese a la crítica, el mandatario reconoció que Musk “trabajó duro e hizo un buen trabajo”, aunque sugirió que su desacuerdo podría estar motivado por la eliminación del crédito fiscal para autos eléctricos en el nuevo plan. “Lo sabía mejor que nadie y nunca tuvo un problema… hasta que se fue”, puntualizó.
El plan fiscal en debate
Bautizado por Trump como “el gran y hermoso proyecto de ley”, el plan fiscal busca extender los recortes impositivos implementados durante su primer mandato (2017–2021) y sumar nuevas exenciones como parte de su agenda de campaña, incluyendo beneficios fiscales para las propinas, las horas extra y la compra de automóviles fabricados en EE.UU.
La iniciativa, ya aprobada en la Cámara de Representantes, se encuentra ahora en proceso de revisión en el Senado, donde enfrenta escepticismo incluso entre algunos republicanos. La Casa Blanca espera lograr un voto final antes del 4 de julio, Día de la Independencia.
