
Durante su intervención ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, el presidente dominicano Luis Abinader expresó su profunda preocupación por la agudización de la crisis humanitaria en Haití. Según el mandatario, el vecino país enfrenta una situación sin precedentes, dominado por el colapso de sus instituciones, el control territorial de bandas armadas y una violencia generalizada que mantiene aterrorizada a la población.
Abinader subrayó que la inestabilidad en Haití no solo representa una amenaza para República Dominicana, sino para toda la región del Caribe. Advirtió que el 80 % de Puerto Príncipe se encuentra bajo el poder de grupos criminales, lo que hace inviable cualquier solución interna sin una intervención internacional estructurada.
En ese contexto, reiteró su respaldo a la Misión Multinacional de Seguridad (MSS), liderada por Kenia, que fue autorizada en 2023 por el Consejo de Seguridad de la ONU, pero que aún no ha logrado sus objetivos principales por falta de recursos y personal.
Abinader hizo un llamado urgente a los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad para aprobar una nueva resolución que fortalezca dicha misión, antes de su vencimiento el próximo 2 de octubre. También destacó la importancia de establecer una estructura de mando clara y un sistema de evaluación continua para la MSS.
Finalmente, el presidente dominicano llamó a revitalizar el papel de la ONU como guía y faro en tiempos de crisis, y no solo como observadora de conflictos.











