Este miércoles, alrededor de la 1:00 p.m., el Ministerio Público concluyó la lectura de la solicitud de medida de coerción contra los hermanos Antonio y Maribel Espaillat, imputados de homicidio involuntario debido al colapso del techo de la discoteca Jet Set, tragedia ocurrida el pasado 8 de abril, que dejó un saldo de 235 muertos.
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La audiencia, que tuvo lugar en el Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, fue recesada por una hora tras la finalización del documento. Se espera que la sesión se reanude a las 2:40 p.m., según indicó el abogado de los imputados, Máximo Miñoso, al salir de la sala.
El Ministerio Público solicita 18 meses de prisión preventiva para Antonio Espaillat y arresto domiciliario con presentación periódica para Maribel Espaillat. Además, el órgano acusador pide que el caso sea declarado como complejo, dada la magnitud de los daños y la cantidad de víctimas involucradas.
Cambios en el ánimo de Maribel Espaillat
A diferencia de la audiencia del pasado domingo, donde Maribel Espaillat mostró una gran afectación emocional, este miércoles se presentó al tribunal con un semblante más sereno y estuvo acompañada de varios familiares y allegados.
Sentimiento de compasión de la hermana de Rubby Pérez
Lidia Pérez, hermana del fallecido merenguero Rubby Pérez, quien fue una de las 235 víctimas mortales del colapso, también estuvo presente en la audiencia. Lidia expresó que, aunque la tragedia es dolorosa, no siente alegría al ver a los imputados en el banquillo de los acusados. “La justicia no es venganza. Sentí compasión. Le dije: ‘Señor, dale fortaleza para que pueda enfrentar su responsabilidad’. No te puedo decir que me sentí alegre”, declaró.
El caso sigue generando conmoción en la sociedad, y el proceso judicial continúa mientras se busca esclarecer las responsabilidades por una de las tragedias más impactantes en la historia reciente del país.
